top of page
Search

Las tardes que no se vuelvan Grises

Updated: Apr 17, 2020




Al final de mi jornada de trabajo y después de atender a diferentes personas me queda una sensación que me falta por hacer algo y no es parte de mi trabajo o asuntos personales, sino más bien deseo ver cómo andamos en el mundo.

Veo cada día que hay mucha gente viviendo una “miseria” en la sociedad y no me refiero a lo material, sino que a veces andamos “mendigando” sentarnos a dialogar, ser escuchados o buscando pasar la tarde con charlas constructivas con personas que desean lo mismo, mejorar el ambiente donde vivimos. Pero hay muchas situaciones hoy en día que nos limita y nos frustran.


Tenemos que caminar con paz y con firmeza y hasta con cierto celo de que nadie nos “robe” el tiempo para dar “el hombro”, “el espacio” a nuestros semejantes, para darles aliento, compartir lo que podamos, disfrutar de los momentos que nos regala la vida. Disfrutemos lo poco o lo mucho que tengamos; que no te controle la soberbia social de sentir que siempre mi verdad va primero, no dejemos que cualquiera cosa nos desenfoque de sonreír, saludar, aunque no te saluden, de decir hola, que le vaya bien, buenas tardes, si hay un desacuerdo, buscar llegar al acuerdo. No perdamos la cortesía con tonterías, practiquemos las buenas costumbres, sé que todavía hay mucha gente que las mantiene, pero hay demasiado dolor y vacíos en nuestra sociedad actual que es necesario reforzar y recordar no perder las habilidades de la paz.


Vivimos en un mundo demasiado material que no nos permite profundizar esos momentos que les describo, un momento donde pueda sentarme a charlar y contemplar lo mejor que ya tenemos para transmitirlo a los que amamos y a los demás.


Debemos de dejar de llenar nuestras mentes de basura informativa que solo nos va a causar ansiedad y perder nuestra paz interior. No debemos de perder el gusto de dialogar, escuchar y aprender de los demás, escuchar la historia de tu amigo, de un hijo, de la esposa, disfrutando de una tarde con un buen aroma de cerrar el día sintiendo que aportaste algo a este mundo lastimado, que pudiste escuchar a alguien que estaba necesitado, que ayudamos, que participamos.


Si eres de esas personas que quiere esforzarse para que todo lo que te rodea esté mejor, empieza por ti, desecha toda lo que no te ayuda a ser mejor, saca de tu vida todo lo que te estanca, lo que no te permite avanzar en tus pasos hacia nuevas y profundas experiencias; distanciaste de las actividades que distorsionan la realidad y busca el camino de un mundo con esperanzas que siga sorprendiéndonos.


Disfruta los momentos y compártelo con los que amas y tu tarde no será nunca gris, sino más bien clara con la luz de las estrellas, ya que tus ojos verán de otra manera ese atardecer lleno de belleza y sabiduría.

 
 
 

Comments


bottom of page