Buscando el Camino

No te rindas son palabras que mis padres nos decían todo el tiempo, con su ejemplo, testimonio y palabras, siempre era muy especial escucharlos a través de lo que nos decían nos manteníamos luchando en los desafíos escolares y de nuestra casa. Nos enseñaban a salir a adelante sin la necesidad de aplastar a nadie, siempre nos decían debes de actuar bien, dale honor a la familia; respeta a tus semejantes. Ama lo que hagas.

Ahora ya de adulto que tiene la responsabilidad de sacar adelante la propia familia donde siempre andamos buscando los ingresos para cubrir las necesidades materiales de la vida cotidiana, muchas veces podemos llegar a vivir solo para eso, trabajar para buscar más ingresos por qué no te alcanza a o porque quieres vivir con excesos materiales. Pero si nos ponemos a reflexionar cubrir las necesidades básicas, viviendo con austeridad, mejorando continuamente nuestra habilidad para aprender nuevas cosas para no quedarnos sin trabajo o mejorando el nivel de los ingresos. Esto le llamaba mis padres “buscar el camino”, ellos nos enseñaron a trabajar desde jovencitos sin descuidar la escuela, no enseñaban a que combináramos, el conocimiento, el emprendimiento, nos ponían a realizar pequeños proyectos de negocio y también cuidaban enseñar la dimensión verdadera del dinero como un instrumento o herramienta más que sentir que eso nos da la felicidad.

La felicidad era parte del disfrute de vivir los proyectos de convivir con la gente y sentirnos útiles con esos proyectos. Pero al mismo tiempo sentíamos que podíamos hacerlos y que nos remuneraba con ingresos para soportar la escuela y nuestras necesidades básicas. Aprendimos siempre a llevar un presupuesto, no endeudarse demasiado, buscar invertir. Realizar estos ejercicios financieros nos da la creatividad para recorrer los caminos con una paz interior y la confianza de que puedes llevar a cabo un proyecto que cubra las necesidades de la familia; al mismo tiempo desarrollas una disciplina con los documentos, escribes los pasos que vas hacer para salir adelante y también puedes escribir los pasos a realizar por tu familia si llegas a faltarles. Es una responsabilidad y una gran bendición el trabajo, pero se vuelve aun mas bendecido si les damos un cierto toque de profundizad y disciplina al tener organizado un plan, un presupuesto, una guía financiera, organizar un proyecto de negocio si te llegara a faltar un trabajo formal.

Vivimos en un mundo muy cambiante lo que antes era habitual ahora ya no lo es. Veamos al interior de muestras casas, de nuestra persona, detengámonos un momento y veamos que camino puedo tomar, que son las cosas que yo puedo hacer, que ideas tengo, cuales son mis habilidades, el hacer ese inventario te da una fuerte sensación de paz y de confianza.

Incluyamos a los miembros de nuestra familia para que aprenda desde jóvenes que pueden hacer en su jornada de vida, hay muchos proyectos modernos que se pueden hacer sin distraernos de nuestras actividades primarias como la escuela o nuestra principal fuente de ingresos.

El desarrollar esta disciplina de buscar los caminos que te llevan a obtener recursos, esto va a generar también que puedas participar en proyecto de beneficencia para otros y también para enseñarle como salir adelante en los momentos difíciles de la vida; esto generara todavía aun mas bendiciones para ti porque tu cabeza se llena de creatividad, paz, amor, sabiduría ayudando a los demás.

Siempre les digo a mis amigos que tienes guardado en la cochera, más de un año sin usar, si tienes cosas ahí sin usar ya no te pertenecen, haz espacio para nuevas cosas y vende eso que tienes guardado o regálalo, pero no te quedes con cosas que te anclan que te perjudican a seguir creciendo.

La vida es pasajera y mientras vivamos en este mundo, gocemos las bendiciones, compartiendo lo que llega a nuestras manos a muestras mentes a nuestra vida.

Todos los caminos que recorramos para obtener recursos, solo es para que seamos mejores administradores, una persona es un instrumento para servir y enseñar a los demás lo que podemos hacer para mejorar este mundo.

Siéntate en un lugar disfruta de alguna bebida o bocadillo y observa porque vamos tan deprisa en los caminos, que andamos buscando, ¿solo el dinero?; si es así no estamos entendiendo nuestra misión en la vida. La excesiva comodidad nos daña por eso queremos tener más cosas materiales pero la verdad no la necesitamos, nos programan a que las tengamos; pero esas cosas viene y van, solo son momentáneas. Lo que debemos hacer es tener la capacidad para usarlas para brindar momentos de alegría y esperanza a los demás.

Bendiciónes.